Sandalias
Sandalias y gorritos aguardaban formales en sus respectivos casilleros a que alguien se decidiese a escogerlos de entre toda la variopinta oferta.
El silencio de su espera era tan espeso como una barra de mantequilla. Todos ellos parecían saber que, de que fuesen los elegidos, dependía el librarse de la devolución a fábrica, con la posterior humillación de acabar en cualquier puesto de baratillo, y, sobre todo, el poder ir a la playa este próximo y ya cercano verano luciéndose en la cabeza y pies de alguna bella damisela.
La fotografía está obtenida en la tienda de Zara del centro comercial Artea (Leioa/Bizkaia).
0 Comments:
Post a Comment
<< Home